crianza

CÓMO PLANIFICAR LOS REGALOS DE NAVIDAD

Arrancamos noviembre con mucha incertidumbre, dadas las circunstancias que estamos viviendo con el COVID y sin saber muy bien cómo pasaremos este año la Navidad. Está claro que van a ser una navidades muy raras y diferentes, como todos estos meses que llevamos. Pero al final, si decides celebrarlo, no está mal planificar con tiempo cómo lo vamos a organizar.

Una de las cosas que más preocupa cuando tienes hijas o hijos es el tema reuniones familiares y el tema de los regalos. Este año no sabemos si vamos a poder reunirnos, así que el peso recae en qué regalos comprar.

Desde que nuestra hija mayor nació teníamos claro que no queríamos una avalancha de regalos por Navidad. Cuando nosotros éramos pequeños, celebrábamos un día especial en el que nos hacían regalos, el resto eran simplemente de reunirse con la familia. Pero vivimos en una sociedad que ha hecho suyas fiestas y celebraciones de otras culturas. Es algo muy respetable, cada familia decide qué y cómo celebrar. El problema es que cuando cada celebración supone un despliegue de regalos, al final nos encontramos con infantes saturados de juguetes y con mucha ansiedad por abrir y descubrir el regalo.

Desde el respeto por la decisión que cada cual tome, nosotros decidimos repartir los regalos por temáticas y celebración. También decidimos juntar todos los regalos de una vez y no que nuestras hijas fueran recibiéndolos en dosis de cada casa de un familiar.

En Cataluña se celebra por tradición el Tió. Por si no lo conoces, es un tronco al que se le da de comer durante los días previos a la Navidad y la noche del 24 de diciembre se le cantan canciones para que «cague» regalos. En cada casa se celebra a su manera, muchas familias optan por poner debajo del Tió cosas de comer, otras juguetes para las niñas y niños y en otras ropa o accesorios.

Mi pareja es de Rumanía, por lo que desconocía esta tradición por completo, y mi familia tiene raíces andaluzas, así que en mi casa tampoco lo celebrábamos. Sin embargo, nosotros consideramos que es una tradición bonita para nuestras hijas y decidimos hacerla nuestra.

A parte del Tió, nos encontramos con que la llegada de Papá Noel a las casas está muy arraigada en nuestra cultura, a pasar de venir de fuera. Cuando yo era pequeña sólo celebrábamos la llegada de los Reyes Magos. Pero ahora parece inconcebible no celebrar Papá Noel. Como entendemos la ilusión que supone para nuestras hijas celebrarlo, decidimos también incorporarla al repertorio navideño.

En conclusión, nos encontramos con unas fiestas en las que tenemos tres días señalados donde habrá regalos. ¿CÓMO LO ORGANIZAMOS?

Nuestra manera de planificarlo, y no saturar a las niñas con regalos y juguetes que después no valoran, fue separar por días y temáticas. Es decir, el Tió en nuestra casa sólo trae animalitos de juguete. Papá Noel nos deja libros y cuentos debajo del árbol y por último los Reyes Magos traen los juguetes.

Y… ¿CUÁNTOS JUGUETES? Pues eso es algo que cada familia debe consensuar. Para mí es importante que mis hijas reciban sus regalos con ilusión y los disfruten. Que no arrinconen las cosas y se dediquen a abrir compulsivamente paquetes sin casi mirar lo que hay dentro. Así que tú que conoces a tu hija o hijo, decide qué capacidad tendrá de sostener ese momento sin verse abrumada o abrumado.

Si aún no sabes cómo va a reaccionar; una buena manera es limitar el número de regalos a:

· Algo que necesite: ropa, zapatos, material escolar, etc.

· Algo que pida y que le haga mucha ilusión. El capricho que quizás tú no escogerías pero que sabes que quiere y que entra dentro de vuestra forma de criar.

· Algo para leer. Yo aquí me volvería loca, hay cuentos y libros preciosos. Así que me tengo que controlar.

· Algo educativo; actualmente hay muchísimos juguetes educativos que les llaman mucho la atención y con los que juegan y aprenden sin darse cuenta.

No es fácil limitar tanto y menos cuando cada familiar tiene ilusión por hacer un regalo maravilloso. Pero al final, el bebé, niña o niño, no sabe de dónde viene cada regalo y aunque es complicado, a veces es mejor unir fuerzas y que sean la madre y el padre quien decida qué regalos comprar de parte de todas y todos.

¿CÓMO DECIDO QUÉ JUGUETES SON MEJORES? Esta pregunta está en nuestra cabeza y es normal que estés leyendo esta entrada con la intención de tener más claro qué comprar. Sinceramente creo que es muy difícil que te digan lo que le va a gustar a tu hija o hijo. Con qué va a jugar. Quizás a mis hijas les apasiona una cosa y a tu hija o hijo ni le llame la atención.

Lo que sí puedo contarte es lo que he ido observando a lo largo de estos casi cuatro años en mis hijas. Su juego ha ido evolucionando y aunque cada una tiene un estilo diferente, puedo decir que he visto ciertas similitudes.

En la etapa de 0-12 meses les llamaba mucho la atención los juguetes de arrastre y movimiento. Las ruedas, las pelotas sensoriales, todo el material para las cestas de tesoros, cuentos con texturas, juguetes para el agua, etc.

A partir de los 12- 18 meses mis hijas empezaron con el juego simbólico, el de imitación. La cocinita es un juguete que suele gustar mucho, los cochecitos de bebé (tanto niñas como niños). Por otro lado, empezaron a disfrutar mucho con los juegos encajables. Puzles sencillos, cajas para apilar, etc.

Cuando se han ido acercando a los 24 meses el juego ha ido madurando y aunque hay momentos en los que siguen jugando a todo lo que he nombrado anteriormente, el juego es mucho más meticuloso. Les empezaron a llamar la atención los oficios, los disfraces y su discurso durante el juego va siendo más elaborado.

Entre los 2 y los 3 años simplemente han ido recogiendo todo el juego anterior y lo han ido ampliando. Dándole una nueva visión a los juguetes y usándolos de otras maneras. Mezclando juegos y cada vez van requiriendo más concentración.

¿QUÉ JUEGOS NUNCA FALLAN? Pues creo que es algo muy difícil de decir, sin embargo, por mi experiencia, los animales y el juego desestructurado son con los que más tiempo se entretienen. Personalmente me encantan los juguetes de madera, pintados con tintes ecológicos y artesanales. Puede echarle un vistazo a Grapat, Ocamora, Tellfusta y PlanToys, tienen verdaderas joyas.

Como ves, tampoco he concretado mucho en cuanto a qué juguete comprar. Me resulta imposible hacerlo y creo que es una responsabilidad que no quiero tener. Observa y sabrás cuál es la mejor opción. Por suerte, hay muchas tiendas de juguetes y de crianza en las que nos asesorarán de maravilla según la edad. Luego, en base a lo que tú has visto que le llama la atención y lo adecuado para su edad, decides. Recuerda que en los tiempos que estamos viviendo, más que nunca, el pequeño comercio nos necesita y que las tiendas de barrio muchas veces son donde encontraremos el mejor asesoramiento.

Ten en cuenta que si decides no ir comprando juguetes a tus hijas o hijos durante el año, y hacerlo sólo en fechas señaladas, también tienes la opción de incluir regalos con previsión. Aunque cuando lo reciba igual no le hace mucho caso, puede que en unos meses sea su juguete preferido.

Por último, me gustaría hacer una mención al tema de los envoltorios. Entiendo que un regalo bien envuelto es precioso. Pero envolver cada paquetito en un trozo de papel que vamos a desgarrar y tirar en 10 segundos, me parece un barbaridad. Sólo tienes que ver cómo están los contenedores de basura después de Reyes. Sólo tenemos un planeta y debemos cuidarlo. Al menos ese es el mensaje que queremos transmitirles a nuestras hijas. Hay que intentar ser sostenibles.

¿Os apetece envolver? Hay muchas maneras de hacerlo sin tener que usar papel. Piensa también si la criatura que va a recibir ese paquete sabe o no abrir el regalo. Cuando son muy bebés, al final somos las personas adultas quienes abrimos los paquetes… ¿Es necesario malgastar tanto papel para terminar abriendo nosotros los regalos?

Apelo a vuestro sentido común y a vuestra imaginación. Podemos usar telas, podemos colocar los regalos súper bonitos debajo del árbol, sin envolver, al lado de sus zapatos y que se los encuentren por la mañana. Podemos aprovechar unos regalos para envolver otros; por ejemplo un pijama para envolver un juguete. También podemos comprar un saco con el nombre o la foto de nuestra hija o hijo y meter los regalos dentro. Incluso podemos hacer el saco con ellxs y que sea una actividad más para hacer juntxs. Hay mil maneras, encuentra la que va más en sintonía con la tuya y con tus valores.

Gracias por estar una nueva semana ahí y esta vez me gustaría pedirte si te apetece compartir el regalo con el que triunfaste de lleno. ¡Qué tengas un bonito día!

FOTO CABECERA: PAULA PELLICER

2 Comentarios

  1. Laia

    5 noviembre, 2020 at 08:19

    Hola. Yo triunfé de lleno con mi sobrino de 3 años este Sant Jordi (que con el Covid «celebramos» en junio). Le regalé un libro de gran formato de maquinas articuladas (le encanta todo lo que tenga ruedas). Es capaz de estarse ratos largísimos pasando paginas y moviendo brazos articulados, bolquetes, puertas…

    1. La Mamisis

      10 noviembre, 2020 at 12:09

      Hola Laia! Los libros y cuentos son siempre un acierto! Y mucho más si se pueden manipular 🙂 Muchas gracias por leer el blog y por tu aportación. Un abrazo!

Responder a La Mamisis Cancel